Recetas para parejas: Tengo hambre de caricias
Estoy segura que un día al llegar a casa has tenido hambre… hambre de caricias. Quizás querías un beso de bienvenida, un abrazo reparador, una palmadita en el culete, la cena lista en la mesa…
A veces con el día a día, olvidamos estas caricias y nos acostumbramos a vivir sin ellas. Que pena… ¿por que has dejado de hacerlo tú? ¿te gustaría recuperar una caricia? ¿se lo has dicho a tu pareja?
En realidad, es una de las personas más importantes de nuestra vida, pues estamos compartiendo nuestra día a día con él o con ella. ¿no se lo merece quizás? ¿y tú? ¿das caricias? y lo más importante ¿pides caricias? Aunque también es cierto que aunque las pidas, unas veces te las darán, otras no y otras las tendrás que negociar. No pasa nada…
Tener una buena comunicación en la pareja
es clave para una relación sana.
Si nos volvemos más técnicos, podemos tener caricias físicas, que tienen que ver con todo lo que sea tocar o gestos más externos a la otra persona… el consabido cachete en el culete, tocarle la cara al otro, los besos… Y también tenemos las caricias verbales. Que son todas esas palabras escritas o habladas que le decimos al otro cuando queremos decirle que nos gusta, que es especial y que le deseamos. En esto han ayudado las redes sociales, por que con un simple mensaje al móvil, podemos alegrarle la mañana a nuestra pareja.
Estos dos tipos de caricias son igual de importantes para mantener sana nuestra relación de pareja. Pero a cada uno de nosotros nos gustan un tipo de caricias. Y también depende del momento. De saber dar caricias, de recibirlas y sobretodo de saber pedirlas. ¿Y a tí, que caricias te gustan más?
¿Quieres mejorar tu relación de pareja? ¿Tener una buena comunicación en pareja?
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